La cuestión es que según la página, estoy en una etapa de introspección y bla bla bla. Yo me río porque clau te salta con cosas así todo el tiempo y me agarra esa angustia eterna de pensar que en míseros meses voy a estar a mil quinientos kilómetros de mi madre y me da por protagonizar uno de esos ataques de hipersensibilidad. No sé en que momento empecé a basar mi vida en sentimentalismos y dejar de ser una cold bitch. Espero que no haya sido desde el momento que me puse a llorar cual huérfana en plena guerra con literatura femenina. También me gustaría mencionar que dejé de ser una canción cursi de Belle And Sebastian y ahora sería algo así como Jennifer del Estereo.
Y hoy a las siete de la mañana, mientras posponía la alarma del celular por decimocuarta vez, me abracé a la perra que dormía al lado y creo que llegué a la conclusión que no sé si tengo tantas ganas de ser grande ahora.
2 comentarios:
A donde quiera que vayas llevate a tu perra, porque te va a hacer mucha falta!
Lulalligator y su batalla por crecer. Le adoro, pequeño personaje.
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