jueves
Siento que estoy de malhumor hace una semana plus, hoy casi me levanto de mi asiento en el colectivo para saltarle en la yugular a una nenita insoportable que no tuvo mejor idea que ponerse a cantar Manuelita la tortuga a todo lo que daba a escaso medio metro mío. Por dios, odio a la gente que se reproduce. En relación a todo lo otro: siento que se va todo al carajo cada vez más, ayer me enamoré de un chico que tardó una charla sobre guitarristas y tres intercambios de temas de Sonic Youth en decirme que tenía novia y como siempre, sigo sufriendo por partida cuádruple. Ineficiencia. Si, esa es la palabra que voy a usar para presentarme: Hola me llamo Lucía y soy una ineficiente. Ayer el ejemplo de eso me confundió con una foto de Nan Goldin, me dijo un par de cosas que borré de mi cabeza porque maduré treinta años, me preguntó con quien me besaba ahora y después se fue. Con la puerta del baño me beso ahora, descubrí que me da mas satisfacciones que cualquiera. Ineficiencia al cuadrado. Acabo de almorzar gomitas violetas, decidir mandar todas mis obligaciones al carajo y quedarme en la cama hasta mañana, despertame en Agosto.